martes, 8 de noviembre de 2011

De vuelta

Hola a tod@s!!
Pues tras unos días desaparecida, ya estoy de vuelta y con mucho que contar y enseñar, claro. He colgado algunas fotos porque como se suele decir, una imagen vale más que mil palabras y aunque lo suyo es vivirlo, al menos espero que os ayuden a haceros una idea de lo que ha acontecido en estos días por aquí.
Jota llegó bien y continúa así, disfrutando a tope de los días que le quedan por Mozambique, y yo con él. El sábado pasado estuvimos por Maputo, que yo aún tampoco habia tenido la oportunidad de conocer la ciudad. Además de largos paseos por las calles principales de la ciudad, visita a la estación de tren que es preciosa y demás, visitamos la FEIMA, un proyecto de la Agencia española de cooperación donde se exponen muchos artesanos y venden sus productos. Tuvimos la dicha de que era último sábado del mes, lo que implica que hay comida típica mozambiqueña y música en directo. Echamos la tarde la mar de agusto, jeje. Pero nuestra suerte por un día no acabó aquí, por la noche, pudimos disfrutar en la Plaza de la Independecia de un pedazo de festival de música africana. Impresionante como cantan, tocan y sobretodo, se mueven...El domingo visitamos la Ilha de Inhaca, a 2 horas de Maputo en ferry. El viaje divertido aunque fugaz; nos quedamos con ganas de pasar una noche allí y de disfrutar de un baño en sus playa, ya que en todo el día subió la marea lo suficiente ni tan siquiera para mojarnos los pies enteros. Tanto es así, que desde esta isla, se puede llegar a pie a otra llamada Isla de los Portugueses. En cualquier caso, nos encantó; una bella y tranquila isla para volver y por qué no, quedarse. El lunes temprano apañamos una chapa camino a Manhiça, acompañados por Tasmiya, una compi del centro. Una experiencia que hay que vivir si vienes a Mozambique. Chapa es todo aquel vehículo que transporta pasajeros y reune una serie de caractaristicas peculiares; la principal es que no sale hasta que no está lleno, y cuando digo lleno, es lleno. Es llevado por dos personas, que suelen ser hombres: el conductor y el cobrador; entre ambos hay un lenguaje de signos y sonidos que solo ellos entienden y perfectamente saben cuando hay que parar, cuánto hay que cobrar, cuándo hay que sobornar. El conductor parece que es el que tiene más autoridad pero el cobrador es el más avispado; es digno de ver como organiza para que TODO entre y cuando parece que ya no cabe nada más, para en el camino y monta a otra mujer, con su respectiva criança a las espaldas envuelta en la kapulana y su bolsa de equipaje que trae sobre la cabeza. Él nunca se sienta, ya sea el recorrido de 30 minutos o de 7 horas, porque es asiento que pierde claro está, pero es increible como busca el huequino (escalera, culo contra la ventanilla, entre los pies de alguno, sobre las maletas y cuando llena el cupo, se relaja y consigue dormir, a pesar de las circunstnacias. No he visto dar cabezados tan amplios como los que estoy viendo aquí, nuca-espalda, barbilla-esternón, de alante a atrás hasta el tope. Aquí no hay paradas ni estaciones, cualquier sitio es bueno para apañar una chapa. Cómodo no será, pero práctico y ecológico, sin igual.
Y tras este breve relato irónico-ilustrativo acerca de las chapas, os dejo.
Mañana seguiré contando el resto de la semana porque me caigo de sueño.
Boa noite!! Até amanhá!!

3 comentarios:

  1. Ya teniamos ganas de saber de ti.
    Bonitas las fotos y aprobecha los dias que te quedan a tope .
    BESOS DE TODOSSS

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  2. Me encanta saber de ti. Guapísima en la foto de la bahía!Disfruta y aprende pa pasar el testigo a los que seguimos tus pasos. Besos de una R chica.

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  3. mamencitaaa!! ya te vemos que estas muy bien!! cuanto me alegro!!! Vaya "Chapa" en Mozambique que hasta se duermen de pie!! jeje! Disfruta mucho chiquinina, que te veo muy bien! Ánimo y un abrazo muy fuerte!!
    Berta

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