miércoles, 30 de noviembre de 2011

Até já!!

Bueno, hoy es mi último día aquí, y resumir lo que han significado estos dos meses para mí en Mozambique, no es fácil y tampoco creo que sea necesario. Lo que sí puedo decir es que esta experiencia me ha hecho aprender, madurar, reir, llorar, valorar aun más lo que tengo en mi vida, conocer otra cultura y otras formas de vivir, tan válidas y sorprendentes como la mía, aprender otro idioma, conocer gente nueva que me aportó muchísimo con cada conversación o gesto, disfrutar de lugares mágicos, descubrir nuevos medios de transporte, nuevos platos y bebidas, música y bailes, ropas, constumbres y tradiciones, disfrutar del calor en noviembre y de una luna que no miente en el hemisferio sur... abrir mi mente hacia este gran mundo, tan diferente, pero tan parecido en su esencia según el lugar en el que nos encontremos. Porque en definitiva, el ser humano, sólo pretende sobrevivir lo más digna y felizmente posible. Y debería ser tarea de tod@s, hacer que esto sea una realidad para cualquier persona, de cualquier país, de cualquier raza, edad y sexo. Me doy pues por satisfecha, habiendo sido capaz de darme cuenta tan sólo de esto y espero que esta lección aprendida, nunca se me olvide y a partir de hoy, viva todavía más en función al convencimiento de que un mundo justo es posible y si cada uno tenemos presente esto en nuestras actuaciones podemos conseguir que así sea. El poder del cambio, la solidaridad, la justicia, la paz, no está en los políticos, está en el pueblo. Si las televisiones no nos muestran lo que pasa en Mozambique, igual personas de a pie, como yo en este caso, o podria ser cualquier otr@, tenga que venir hasta aquí para verlo con sus propios ojos y ser voz de ello en países del norte y desde allí actuar, pelear, recriminar, gritar, a los que votamos y nos representan, que en otras partes del mundo hay gente pasando hambre, siendo viej@ con 40 años, sin acceso a una educación básica...
Bueno, no quiero extenderme ni alterarme más, no es el momento.
Sí agradeceros vuestra compañía durante esta aventura; Saber que me leíais desde casa y vuestros comentarios han sido muy reconfortantes para mí. Os quiero mucho amig@s, familia, enamorado, jeje, y os he tenido presentes en todo momento. Gracias por entenderme y apoyarme siempre. Tengo que reconocer que estoy algo triste, que me da pena que esto termine, pero por otra parte, estoy deseando veros a tod@s y abrazaros.

lunes, 28 de noviembre de 2011

TODO PASA POR ALGO




Mi madre siempre me dice, todo pasa por algo hija. Y puede ser que mi destino, si es que existe tal cosa, no haya tenido el detalle de ofrecerme esta experiencia sólo para mi disfrute y aprendizaje, personal y pofesional.
Como cada hecho en la vida, una serie de intereses, ilusiones, circunstancias y decisiones encadenadas, fueron las que me trajeron hasta este país. Un curso de medicina tropical en la facultad de medicina en Badajoz en el 2009, me permitió conocer a Joaquín Gascón, jefe de servicio de la Unidad de Medicina Internacional del Hospital Clinic. A través de él, pude conocer que existía la opción de ir allí a formarme en lo que de siempre me habia apasionado. En Barcelona pasé dos meses de verano del 2010 y fue allí, de forma inesperada y casual, o eso pareció, donde me hablaron del proyecto que tenian en Mozambique, del CISM, de Manhiça y de la posibilidad de venir a rotar aquí. Tras la entrevista personal y decidirme a aceptar tras la aprobación de los que me seleccionaron, aquí me planté un año después.
Y ahora, a punto de terminar esta experiencia, una se pregunta qué es lo que pudo realmente traerle aquí, cual era el verdadero sentido de este viaje, y las reflexiones, aún por asentarse, me conducen a pensar, que fuera del enriquecimiento personal, de aclararme en ideas, madurar y cerciorarme de algunas y confundirme y desencantarme con otras, ver que la realidad del trabajo en terreno no es para nada fácil, conocer algunas de mis posibles limitaciones, también de descubrirme habilidades y virtudes que fuera de situaciones como las que viví aquí no hubiera podido conocer. Y además también de permitirme conocer Mozambique, su cultura, sus paisajes, su gente. Aparte de todo esto, que ha sido increible para mí, hay algo más, algo de lo que hasta ahora, apenas he hablado, pero que siento, me atará a partir de ahora a este país, y hará que esta experiencia se prolongue y no quede en lo que hasta el día de mi vuelta y posteriores relfexiones y recuerdos en casa, será.
Se trata del Orfanato "Hope for the future", que aún con ese anglosajón y poco atractivo nombre, a mi gusto, me ha enganchado enormemente. Se trata de 26 niñ@s, al cuidado de Marta, fundadora del mismo, que gracias y solamente a la ayuda de personas que de forma particular hacen sus donaciones, puedan sobrevivir de forma medianamente digna, estos que fueron víctimas de una horfandad temprana por las causas que asolen a este país, en su mayoría VIH.
Espero que el proyecto que hay en mi cabeza, no se desarme y podamos hacer mucho por mejorar la vida de estos niñ@s y otros que viven su misma realidad. Quizá este tiempo aquí, también me ha hecho tener la percepción de que la cooperación a pequeña escala, consigue mas cosas que la gran cooperación, o al menos, el modo en que se trabaja en este sentido, vaya más con mi estilo y mi ética. Cuento con el apoyo y el respaldo de Movimiento Páramo ONGD, sin duda alguna con la de tod@s vsotr@s y válgame esta entrada también como propio compromiso personal.
Hablaremos y actuaremos sobre esto.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Saudade

Saudade, es una palabra en portugués que viene a significar añoranza, nostalgia, morriña. Y es esto lo que yo sentia los primeros días aquí, en Mozambique y que curiosamente, ahora, cuando me falta una semana para regresar a casa, también siento, pero de lo contrario. Tenho saudade de volver y echar de menos el cielo de Africa, con su color naranja a la hora del atardecer que lamentablemente no podemos disfrutar de la misma forma en España. Tenho saudade, y aún estoy aquí, de las empleadas del centro, Isaura y sus colegas, con las que todos los días me echo unas risas, e intento hacer entender que no pasa nada por ir a una fiesta sola sin mi "marido", a pesar de que baile con otros hombre incluso, o por no tener hijos a pesar de tener los 30, entre otras cosas, y a veces comparto el almuerzo en la cocinita de encima y les doy a probar de mis platos. Tenho saudade de mi cuarto, que ha sido mi pequeño y particular hogar aquí. Tenho saudade de Lúcia y las demás pacientes del cuarto de la enfemaría de adultos, que a pesar de ser duro por el mal estado de su salud, consiguen día tras día hacerme disfrutar y que me enorgullezca de mi trabajo y de tener la dicha de haber podido trabajar con ellas y otros tantos aquí. Tenho saudade de mi gran amigo Carles, catalán de nacimiento y devoción y buena persona de corazón, que tan buenos momentos me está haciendo pasar aquí. Y de los demás compis molungus, que desde el pricipio me acogieron como una más para que me sintiera como en casa: Reyes, Raquel, Pau y familia, Miguel, María, Oscar, y a todos los que han pisado Manhiça de forma fugaz mientras he estado aquí. También tenho saudade de Tasmiya, mi vecina de cuarto durante los dos meses y con la que he tenido conversaciones personales que nos han hecho aprender a las dos mucho. Y de Sergio, la representación masculina en el predio (edificio de los cuartos del centro) con el que también he compartido almoços y jantares (comidas y cenas) en la cocinita de encima, con sus respectivas charlas que me han hecho conocer más Mozambique y su cultura. Tenho saudade de Odete, la cocinera del centro. Y del Dr. Sozinho, Dr.Pita, Técnica Magdalena y mis compis estagiarias estudiantes de medicina, Marta y Yagna, que tanto me han enseñado con su trabajo diario. Y de la dueña del Papú, donde compro todos los días el pan, y que no vez que no me pida una dieta para adelgazar: Doctora, tem que dizerme como posso fazer para ficar delgadinha como voçe!! Y me saca la colección de galletas que vende para preguntarme cual engorda menos, jajaja. Tenho saudade de las chapas, de las playas, de los niñ@s descalz@s jugando con sus coches hechos de alambre y latas de coca-cola, de la xima y el frango grelhado, de las kapulanas, del mato, de los motoristas y porteros del CISM y que tan amablemente me saludan todos los días y agradecen con una sonrisa mi saludo: bom día doctora, obrigado; boa tarde doctora, obrigado. Han sido casi dos meses, pero que han pasado muy rápido. Al prinpio, los días eran largos, pero rápido me resultó fácil adaptarme a este lugar, a este entorno, a este país y a su gente. Y es curioso, como a pesar de los momentos malos, uno siempre se queda con lo bueno y no quiere que termine. Pero esto no es una despedida, no sólo porque aún me queda una larga semana por delante que disfrutar a tope, sino porque tengo seguro que volveré, no sé cuando, pero sé que volveré a Mozambique. Quedan muchas tareas pendientes...

jueves, 17 de noviembre de 2011

Volveremos en busca del león

Preciosas las jirafas

Peazo rinoceronte frente a nosotros!!

Monillos en familia

Impresionante!!

En el río hipopótmos, cocodrilos...benditos prismáticos!!

Al fondo papá elefante

Pumba cruzando!!

Dumbo a nuestro lado

Impala posando con Jota

La tienda y el cochecito

Kruger Park

Como lo prometido es deuda, tengo que contaros como nos fue en el Kruger. Este es un parque natural situado en Sudáfrica, a unos 90 km de Maputo. Es uno de los pocos parques donde puedes entrar y circular con tu propio coche. De grande es como la provincia de Cáceres más o menos. Dentro del mismo hay campamentos habilitados para dormir, con cabañas, bungalows, tiendas. Nos habian hablado de que merecia mucho la pena debido a lo cerca que está de Maputo y a la gran probabilidad de ver animales que hay y de lo emocionante que resulta si nunca has hecho nada parecido. Asi que, como no queriamos perder la oportunidad, y son muchos los documentales de la 2 que nos hemos tragados en siestas varias, allí que nos plantamos los dos, para verlo en directo. Todo fue una aventura desde el comienzo. Para empezar, suponia alquilar un coche y conducir por Mozambique y parte de Sudáfrica, cosa que se hace por la izquierda y en un caos total. Pero no habia miedo, pá alante!!. Jota, demostraste ser un gran conductor. La segunda odisea fue pasar las fronteras, primero la Mozambicana y luego la Sudafricana y con ello el descoloque de pasar del portugué al inglés y del subdesarrollo al desarrollo, todo ello, en un Km de distancia. El paso de fronteras era tal jaleo de rellenar papeles y tal, que se nos pasó un detallín, declarar el coche!! Fuimos conscientes a la vuelta, cuando nos pidieron los papeles y nos faltaba el importante, el que hubiera hecho que no estuviésemos con un coche ilegal en Sudáfrica. Suerte que le caimos en gracia, o le dimos pena, no sé, al policia y nos ahorró pagar la multa; que hubiese sido la segunda, porque a la ida, nos cascaron 1000 meticais (unos 25 euros) por ir a 74Km/h en un tramo de 60; formó parte de la aventura, que le vamos a hacer. A esto hay que añadir que nos la jugamos un poco ya que ibamos sin nada reservado, pero la suerte estaba de nuestra parte y pudimos disfrutar de una agradable noche dentro del campamento Cocodrile Brite dentro ya del parque. Los primeros animalitos ya fueron aparecienco mientras cenábamos en la puerta de nuestra tienda; pensamos que eran una hiena (al otro lado de la alambrada) y un monito o algo parecido junto a nosotros, jeje. La emoción nos hacia ponernos nerviosillos, pero aun no sabiamos lo que nos depararía el día siguiente. Lo que si teniamos claro es que habia que aprovecharlo a tope, asi que a las 5:30h, nada mas abrir las puertas para poder circular por el parque, ya estábamos nosotros montados en el coche. Y ahí comenzó la aventura: elefantes, jirafas, facocheros, rinocerontes, tortugas, leonas, hipopótamos, cocodrilos...hasta tuvimos la gran suerte de ver un leopardo en un árbol!!! Todos iban apareciendo, se cruzaban por la carretera, casi podiamos tocarlos...IMPRESIONANTE!!. Parte de la aventura era ir montado en el coche, a no mas de 50km/h y no quitar la vista de todo lo que nos rodeaba, para no perdernos nada, ni el más mínmo animal. Era fácil cuando de repente veias 10 coches parados, ahí habia algo importante!! jeje. Fueron 12h las que pasamos montados en el coche, y después el viaje de vuelta, con sus respectivas fronteras y la contra de conducir de noche. Acabamos reventados, pero la experiencia única y recomendada para todo el que pueda. Os dejo algunas fotos para que os hagais una idea.
Viva Africa!!

miércoles, 16 de noviembre de 2011

CCC

Si el día de ayer fue duro, cosa que se puede deducir si se lee mi entrada, hoy lo ha sido más si cabe. Las pacientes que María y yo tenemos en el cuarto están todas bastante mal y hoy todo parecía ponerse en contra mas de lo habitual. Ver que podrías hacer mucho mas si contaras con mas recursos y mayor disposición del personal, en mitad de la situación de tener 8 mujeres enfermas a tu cargo en estado la mayoría graves, te genera un nudo en la garganta que te haría salir corriendo sin mirar atrás. Pero no puedes, no quieres, tienes que poner todo de tu parte y esforzarte aun mas en intentar que las cosas salgan bien. María, que lleva aquí desde febrero trabajando a este ritmo y en estas circunstancias, dice que últimamente está abatida, sobrepasada, que hay días que siente que no puede más con esta lucha constante de querer hacer tanto como le gustaría y no poder. Después en la consulta, por si era poco, la mitad de la mañana hemos estado sin luz, cosa que aquí es normal, por lo que no podíamos contar con todos aquellos aparatos que son eléctricos (pantalla para ver las radiografias, hemoglobinas, tensión arterial) dificultándose aun mas el trabajo. Y asi estamos, nadie me dijo que fuera a ser fácil enfrentarse a este medio y por supuesto, cada día me levanto y me digo a mi misma ánimo, y doy apoyo a María y levanto su ánimo como puedo y le alabo la labor que está haciendo aquí, porque ni yo misma sé, sinceramente, si aguantaría un periodo largo trabajando aqui, aunque quiero pensar que sí, porque es lo que siempre he deseado y por otra parte me llena mucho cuando conseguimos que los pacientes mejoren y les damos el alta y vuelven a los controles mucho mejor que la ultima vez, y cumplen los tratamientos, etc. Lo dejo aquí por hoy.

La segunda parte del día ha sido muy interesante. He asistido a la reunión que se realiza dos veces al año del CCC (Comité Consultivo Comunitario). Este es un grupo de 21 miembros, todos ellos personas relevantes y representativas de la comunidad, tales como: representante de asociaciones juveniles, trabajadores de la salud, representante de médicos tradicionales, representantes del gobierno local, de asociaciones femeninas, de organizaciones religiosas, locutora de la radio comunitaria, jefes de barrios. El CCC fue creado hace dos año con el objetivo de facilitar la comunicación entre las comunidades y el equipo de investigadores del CISM. A su vez el CISM, tiene una serie de responsabilidades para con el CCC, que son: formar a los miembros en materia de concepción de proyectos comunitarios y educación para la salud, principios básicos de bioética e investigación científica y nociones básicas de enfermedades especificas. Y por otro lado, orientar a los miembros del CCC sobre todos los aspectos relativos a los estudios. Como sabeis, en el Centro de Salud El Progreso de Badajoz, donde hice mi especialidad, se realiza también mucho trabajo con la comunidad y es por eso por lo que quería asistir a esta reunión que por suerte ha coincidido durante mi estancia aquí a que solo se realiza como he dicho dos veces al año. Pues bien, durante aproximadamente 3 horas que ha durado la reunión, se les han presentado algunos de los diferentes estudios que se están llevando a cabo ahora mismo en el CISM como el estudio de la vacuna de la malaria, otro de control de antimaláricos que se venden en la calle de forma descontrolada y algunos mas. Los integrantes del CCC han aprovechado para hacer sus preguntas y por otra han dado información que puede ser relevante a la hora de llevar a cabo estos estudios. A su vez después, cada uno de estos miembros, es responsable de divulgar toda esta información dentro del organismo que cada no representa y al resto de la comunidad en general. Una de las asistentes es locutora en la emisora de radio local, con lo que la información será dada también por este medio garantizando asi una mayor difusión. Yo he disfrutado como una enana, porque soy una enamorada del trabajo con la comunidad y lo considero fundamental y en este medio, se revaloriza mas si cabe. Después, se nos ha invitado a comer en un restaurante del pueblo, que por poco se nos junta con la cena!! Pero estaba todo riquísimo, jeje. Quiero dar gracias a Carolina, de acción social, que fue quien me invitó a asistir cuando le mostré mi gran interés. Y aprovecho y hago un guiño a Ignacio mi tutor de residencia, que tanto me enseño de trabajo comunitario y que tanto podría aportar aquí; Ignacio, te volverías loco en este medio ;).

Aporto foto para que me veais integradísima en el CCC. Soy la que no tengo camiseta y gorra verde. Y la única molungu!! Jajaja. Besitos.


martes, 15 de noviembre de 2011

Enfermaría de medicina

La “enfermaria de medicina” es como se llama aquí a la planta de enfermos adultos que están ingresados, en la que estoy desde hace una semana. Ya dejé la pediatría, que no sólo resultó ser dura por tratarse de niños, sino porque yo, en mi trabajo, no tengo que tratar a diario con ellos y el manejo es muy diferente al de los adultos. Pues bien, ahora el trabajo comienza a las 7:30h, cuando pasamos a ver estos enfermos entre la Dra. María, el Dr. Pita y yo. Además, también trabajan técnicos de medicina que se encargan de ver algunos cuartos de esta planta. Técnicos de medicina, creo que ya expliqué que son personal formado por un programa del ministerio para suplir la carencia de médicos en el país. Actualmente solo salen unos 60 medicos al año en todo Mozambique. Y esto ha mejorado bastante en los ultimos años, porque hasta hace poco salian apenas unos 20 y solo existía una facultad de medicina en Maputo para todo el país. Tras ver estos cuartos de ingresados, vamos a pasar consulta, hasta las 14:00 o 15:00h, según el día. Por la tarde, dependiendo de quien esté de guardia, aprovecho también para ver los pacientes que llegan por urgencias y hacer los ingresos para el día siguiente. Pues bien, tengo que decir que la parte de adultos es bastante más caótica y desorganizada que la de pediatría. Para empezar, tan solo 2 medicos, María y Pita, se encargan de todos los adultos que entran en este hospital. También hay que añadir, que la mayoría de los estudios de investigación del CISM se centran en la población infantil, por lo que en este sentido, la atención a lo adultos está mas descuidada. Es triste decirlo, pero todos los compañeros con los que he hablado, coinciden en esto, en que siempre se ha “mimado” más a los niños. Ante falta de recursos como material o personal en un momento dado, todo el esfuerzo va encaminado a cubrir la parte de pediatría. El personal contratado por el CISM, excepto alguno como el Dr. Pita, trabajan para los estudios en pediatría, y por ello hay más rigor y mayor sentido de la responsabilidad en el trabajo realizado por este personal que en el contratado por el ministerio, por ejemplo. Y esto ocurre porque falta organización en el hospital, en la jerarquía, no hay nadie que pida responsabilidades y rendición de tareas al final del día; no ven en peligro su puesto de trabajo sino rinden como deberían. Por ello falta sentido de la responsabilidad y los cuatro que la tienen, cargan con el trabajo de todos los que no cumplen y se agotan, se queman. Todos estos aspectos, hacen que los enfermos adultos no tengan la misma atención que puedan tener los enfermos pediátricos. El día a día trabajando se hace muy duro y cansado, porque tienes la sensación de que nada funciona. No puedes limitarte a hacer tu trabajo sino que debes estar pendiente de todo. Os pondré algunos ejemplos. Ahora mismo tenemos en el cuarto a una paciente que dimos de alta el pasado jueves; pues bien, aun está en la cama porque no tiene como volver a su pueblo con su madre que le acompaña. Aquí son pocas las personas que disponen de coche y tampoco hay un sistema de transporte sanitario que funcione en condiciones, con lo que todo se complica. Hoy hemos ido Maria y yo personalmente a hablar con la directora médica del hospital para que resuelva este problema, porque esta paciente necesita de un transporte sanitario ya que no está tampoco para montar en transporte público debido a su delicado estado de salud. Parece que iban a resolverlo esta tarde, mañana lo veremos. En este mismo cuarto tenemos a Elisa, una chica de 19 años, enferma de tuberculosis activa en este momento que agrava mucho más su insuficiencia renal crónica. Pues bien, esta mujer, además de que está gravemente enferma, está sola y aquí estar sola puede significar no comer, no asearse…ya que no hay un funcionamiento del personal auxiliar (llamados sirvientes aquí) encargado de lavar a los pacientes ni tampoco la comida en el hospital es abundante de manera que a la mayoría le tienen que traer comida de fuera sus familiares. Para que os hagáis una idea de la situación, hoy la chica se ha hecho sus necesidades encima, porque no tiene a nadie que la levante, las sábanas y la cama estaban muy sucias, nadie le había dado de comer. Es muy triste ver situaciones como esta y te parece mentira que un hospital pueda funcionar así. Y es más, si tu no estás encima de estas cosas, nadie lo hace. Hemos tenido que pedir por favor que la lavasen y cambiaran las sábanas. Dia tras dia pienso en nuestro sistema sanitario y en lo poco que a veces lo valoramos; no tenemos ni idea, y yo la primera. Si además a esto se le suma que el personal en general esta poco motivado, no tienen demasiado sentido de la responsabilidad, tienen pocas ganas de trabajar, son pasivos…no sé como decirlo; les dices que pongan unas sábanas limpias y la única respuesta que dan es que no hay, pero ni siquiera las buscan, o que por qué no dieron la medicación a una paciente a la hora que le tocaba y te contestan que estaba en el baño en ese momento y se quedan tan tranquilos habiendo quedado a una grave enferma de tuberculosis sin la medicación de la mañana, o pides 4 veces en la misma mañana que recojan el resultado de un test de malaria y al final tienes que ir tú. O como hoy he estado toda la mañana para hacer una punción lumbar hasta que hemos dispuesto de todo el material que precisaba que no eran mas que unas gasas, unos guantes, un catéter y dos tubos. Al principio faltaban las gasas que finalmente encontramos en urgencias de pediatría pero luego faltaba todo lo demás, que estaba en el almacén, pero el que tiene las llaves se había ido y los demás solo dicen, es que esta cerrado el almacén. O que en toda una urgencia no haya un termómetro, o no funcione el aparato de la tensión. Cosas, todas ellas, con las que en nuestro entorno contamos sin tan siquiera ser conscientes. Porque existe una organización, una motivación. No sé de qué depende, si es porque los sueldos son bajos, si es porque no están bien formados, si es porque falta mucho personal y el e hay está desbordado, si es porque el carácter de los mozambicanos, como dicen algunos aquí, es así. Porque falta de recursos hay, de eso no hay duda, pero sinceramente creo, que con lo que disponen, se podría hacer mucho mas, pero falta actitud en las personas. Empezando por el de más arriba hasta el ultimo sirviente del hospital. Quiero dejar claro, que esto no son mas que apreciaciones mias y muy personales, basadas en lo que observo mas también en lo que escucho en las personas que dia tras dia están muy implicadas y se esfuerzan por sacar el trabajo adelante a pesar de todas estas adversidades. Los por qué de que ocurra esto, no los tengo nada claros y me cuesta entenderlo. No culpo a las personas en su particularidad, sino mas al sistema y organización del propio hospital, que no funciona; falta buscar responsables, es lo que creo.

Partiendo de esto, que ya dificulta en sí la tarea, están los enfermos, que en su inmensa mayoría presentan estados avanzados de SIDA con sus correspondientes enfermedades concomitantes. No estoy acostumbrada a ver este tipo de patologías y lo que más me sorprende es la fortaleza de la raza negra. Por ejemplo, a diario veo anemias graves, con cifras de hemoglobinas con las que nosotros no podríamos levantar ni la cabeza y ellos en cambio hasta caminan por los pasillos. Es increíble como el cuerpo humano se adapta a las situaciones y como junto a esto, cambian los criterios médicos. Lo que en España se considera criterio de transfusión (Hb<8), aquí no se pone sangre a nadie que esté por encima de 5. Hay que añadir que como no tengas un familiar que pueda donar la sangre, cosa que aquí se dificulta porque son muchos los que están enfermos, pues no puedes recibir, ya que el banco de sangre está muy limitado. Como veis, todo son ejemplos de las cosas que a diario veo aquí y que voy tratando de asimilar y de entender, desde lo que conozco, y es difícil, porque se mezclan en mi cabeza muchas cosas, es como una lucha constante entre tratar de situarme donde estoy con el no entender porque nosotros si y ellos no, y el intentar explicarme ciertas cosas que ocurren…ufff!!! Necesito más tiempo, más conversaciones aquí, quizá llegar a casa para analizar todo con calma y comprender ciertas cosas…no lo sé. Me encantó una conversación que tuve el otro día con el Dr. Pita, acerca de la prevalencia tan alta de VIH; me ayudó a hacer un análisis de la sociedad mozambicana y en concreto de la posición de la mujer dentro de ella y como todo esto influye en que la propagación de la infección esté descontrolada. La cifra de casi el 40% de VIH +, no se me quita en todo el día de la cabeza, es increíble!! Y esto tiene sus causas, sus factores, que principalmente son pobreza, sobretodo femenina, falta de educación y empoderamiento de la mujer, promiscuidad, falta de información y educación sexual, ignorancia, analfabetismo. Ayer hablando también con Sergio, un chico mozambicano que trabaja en el laboratorio del CISM, me dijo algo muy duro, pero que aquí es una realidad; la mujer prefiere infectarse de VIH, porque sabe que puede tardar en morir unos años, que morir de hambre en unos días, así que se acuesta con hombres aun sabiendo que está infectado aunque se niegue a utilizar preservativo (el hombre es siempre quien decide) y de esta manera al menos la mantiene y tiene para sobrevivir. Hay mucho que hacer aquí, Mozambique necesita un cambio de mentalidad, educación y empoderamiento de la mujer. La voz popular en general dice que el gobierno no invierte mucho en cambiar esto y que el índice de VIH va en aumento. Hoy entre risas comentaban algunos compañeros del hospital que e continente africano no ha desaparecido ya porque la natalidad es altísima, que sino desaparecería a causa de tanta enfermedad.Hay generaciones de padres y madres perdidas y por ende, muchos niñ@s huérfan@s.

Buenas noches, me voy a la cama a seguir reflexionando hasta quedarme dormida.

Enfermaría de medicina

La “enfermaria de medicina” es como se llama aquí a la planta de enfermos adultos que están ingresados, en la que estoy desde hace una semana. Ya dejé la pediatría, que no sólo resultó ser dura por tratarse de niños, sino porque yo, en mi trabajo, no tengo que tratar a diario con ellos y el manejo es muy diferente al de los adultos. Pues bien, ahora el trabajo comienza a las 7:30h, cuando pasamos a ver estos enfermos entre la Dra. María, el Dr. Pita y yo. Además, también trabajan técnicos de medicina que se encargan de ver algunos cuartos de esta planta. Técnicos de medicina, creo que ya expliqué que son personal formado por un programa del ministerio para suplir la carencia de médicos en el país. Actualmente solo salen unos 60 medicos al año en todo Mozambique. Y esto ha mejorado bastante en los ultimos años, porque hasta hace poco salian apenas unos 20 y solo existía una facultad de medicina en Maputo para todo el país. Tras ver estos cuartos de ingresados, vamos a pasar consulta, hasta las 14:00 o 15:00h, según el día. Por la tarde, dependiendo de quien esté de guardia, aprovecho también para ver los pacientes que llegan por urgencias y hacer los ingresos para el día siguiente. Pues bien, tengo que decir que la parte de adultos es bastante más caótica y desorganizada que la de pediatría. Para empezar, tan solo 2 medicos, María y Pita, se encargan de todos los adultos que entran en este hospital. También hay que añadir, que la mayoría de los estudios de investigación del CISM se centran en la población infantil, por lo que en este sentido, la atención a lo adultos está mas descuidada. Es triste decirlo, pero todos los compañeros con los que he hablado, coinciden en esto, en que siempre se ha “mimado” más a los niños. Ante falta de recursos como material o personal en un momento dado, todo el esfuerzo va encaminado a cubrir la parte de pediatría. El personal contratado por el CISM, excepto alguno como el Dr. Pita, trabajan para los estudios en pediatría, y por ello hay más rigor y mayor sentido de la responsabilidad en el trabajo realizado por este personal que en el contratado por el ministerio, por ejemplo. Y esto ocurre porque falta organización en el hospital, en la jerarquía, no hay nadie que pida responsabilidades y rendición de tareas al final del día; no ven en peligro su puesto de trabajo sino rinden como deberían. Por ello falta sentido de la responsabilidad y los cuatro que la tienen, cargan con el trabajo de todos los que no cumplen y se agotan, se queman. Todos estos aspectos, hacen que los enfermos adultos no tengan la misma atención que puedan tener los enfermos pediátricos. El día a día trabajando se hace muy duro y cansado, porque tienes la sensación de que nada funciona. No puedes limitarte a hacer tu trabajo sino que debes estar pendiente de todo. Os pondré algunos ejemplos. Ahora mismo tenemos en el cuarto a una paciente que dimos de alta el pasado jueves; pues bien, aun está en la cama porque no tiene como volver a su pueblo con su madre que le acompaña. Aquí son pocas las personas que disponen de coche y tampoco hay un sistema de transporte sanitario que funcione en condiciones, con lo que todo se complica. Hoy hemos ido Maria y yo personalmente a hablar con la directora médica del hospital para que resuelva este problema, porque esta paciente necesita de un transporte sanitario ya que no está tampoco para montar en transporte público debido a su delicado estado de salud. Parece que iban a resolverlo esta tarde, mañana lo veremos. En este mismo cuarto tenemos a Elisa, una chica de 19 años, enferma de tuberculosis activa en este momento que agrava mucho más su insuficiencia renal crónica. Pues bien, esta mujer, además de que está gravemente enferma, está sola y aquí estar sola puede significar no comer, no asearse…ya que no hay un funcionamiento del personal auxiliar (llamados sirvientes aquí) encargado de lavar a los pacientes ni tampoco la comida en el hospital es abundante de manera que a la mayoría le tienen que traer comida de fuera sus familiares. Para que os hagáis una idea de la situación, hoy la chica se ha hecho sus necesidades encima, porque no tiene a nadie que la levante, las sábanas y la cama estaban muy sucias, nadie le había dado de comer. Es muy triste ver situaciones como esta y te parece mentira que un hospital pueda funcionar así. Y es más, si tu no estás encima de estas cosas, nadie lo hace. Hemos tenido que pedir por favor que la lavasen y cambiaran las sábanas. Dia tras dia pienso en nuestro sistema sanitario y en lo poco que a veces lo valoramos; no tenemos ni idea, y yo la primera. Si además a esto se le suma que el personal en general esta poco motivado, no tienen demasiado sentido de la responsabilidad, tienen pocas ganas de trabajar, son pasivos…no sé como decirlo; les dices que pongan unas sábanas limpias y la única respuesta que dan es que no hay, pero ni siquiera las buscan, o que por qué no dieron la medicación a una paciente a la hora que le tocaba y te contestan que estaba en el baño en ese momento y se quedan tan tranquilos habiendo quedado a una grave enferma de tuberculosis sin la medicación de la mañana, o pides 4 veces en la misma mañana que recojan el resultado de un test de malaria y al final tienes que ir tú. O como hoy he estado toda la mañana para hacer una punción lumbar hasta que hemos dispuesto de todo el material que precisaba que no eran mas que unas gasas, unos guantes, un catéter y dos tubos. Al principio faltaban las gasas que finalmente encontramos en urgencias de pediatría pero luego faltaba todo lo demás, que estaba en el almacén, pero el que tiene las llaves se había ido y los demás solo dicen, es que esta cerrado el almacén. O que en toda una urgencia no haya un termómetro, o no funcione el aparato de la tensión. Cosas, todas ellas, con las que en nuestro entorno contamos sin tan siquiera ser conscientes. Porque existe una organización, una motivación. No sé de qué depende, si es porque los sueldos son bajos, si es porque no están bien formados, si es porque falta mucho personal y el e hay está desbordado, si es porque el carácter de los mozambicanos, como dicen algunos aquí, es así. Porque falta de recursos hay, de eso no hay duda, pero sinceramente creo, que con lo que disponen, se podría hacer mucho mas, pero falta actitud en las personas. Empezando por el de más arriba hasta el ultimo sirviente del hospital. Quiero dejar claro, que esto no son mas que apreciaciones mias y muy personales, basadas en lo que observo mas también en lo que escucho en las personas que dia tras dia están muy implicadas y se esfuerzan por sacar el trabajo adelante a pesar de todas estas adversidades. Los por qué de que ocurra esto, no los tengo nada claros y me cuesta entenderlo. No culpo a las personas en su particularidad, sino mas al sistema y organización del propio hospital, que no funciona; falta buscar responsables, es lo que creo.

Partiendo de esto, que ya dificulta en sí la tarea, están los enfermos, que en su inmensa mayoría presentan estados avanzados de SIDA con sus correspondientes enfermedades concomitantes. No estoy acostumbrada a ver este tipo de patologías y lo que más me sorprende es la fortaleza de la raza negra. Por ejemplo, a diario veo anemias graves, con cifras de hemoglobinas con las que nosotros no podríamos levantar ni la cabeza y ellos en cambio hasta caminan por los pasillos. Es increíble como el cuerpo humano se adapta a las situaciones y como junto a esto, cambian los criterios médicos. Lo que en España se considera criterio de transfusión (Hb<8), aquí no se pone sangre a nadie que esté por encima de 5. Hay que añadir que como no tengas un familiar que pueda donar la sangre, cosa que aquí se dificulta porque son muchos los que están enfermos, pues no puedes recibir, ya que el banco de sangre está muy limitado. Como veis, todo son ejemplos de las cosas que a diario veo aquí y que voy tratando de asimilar y de entender, desde lo que conozco, y es difícil, porque se mezclan en mi cabeza muchas cosas, es como una lucha constante entre tratar de situarme donde estoy con el no entender porque nosotros si y ellos no, y el intentar explicarme ciertas cosas que ocurren…ufff!!! Necesito más tiempo, más conversaciones aquí, quizá llegar a casa para analizar todo con calma y comprender ciertas cosas…no lo sé. Me encantó una conversación que tuve el otro día con el Dr. Pita, acerca de la prevalencia tan alta de VIH; me ayudó a hacer un análisis de la sociedad mozambicana y en concreto de la posición de la mujer dentro de ella y como todo esto influye en que la propagación de la infección esté descontrolada. La cifra de casi el 40% de VIH +, no se me quita en todo el día de la cabeza, es increíble!! Y esto tiene sus causas, sus factores, que principalmente son pobreza, sobretodo femenina, falta de educación y empoderamiento de la mujer, promiscuidad, falta de información y educación sexual, ignorancia, analfabetismo. Ayer hablando también con Sergio, un chico mozambicano que trabaja en el laboratorio del CISM, me dijo algo muy duro, pero que aquí es una realidad; la mujer prefiere infectarse de VIH, porque sabe que puede tardar en morir unos años, que morir de hambre en unos días, así que se acuesta con hombres aun sabiendo que está infectado aunque se niegue a utilizar preservativo (el hombre es siempre quien decide) y de esta manera al menos la mantiene y tiene para sobrevivir. Hay mucho que hacer aquí, Mozambique necesita un cambio de mentalidad, educación y empoderamiento de la mujer. La voz popular en general dice que el gobierno no invierte mucho en cambiar esto y que el índice de VIH va en aumento. Hoy entre risas comentaban algunos compañeros del hospital que e continente africano no ha desaparecido ya porque la natalidad es altísima, que sino desaparecería a causa de tanta enfermedad.Hay generaciones de padres y madres perdidas y por ende, muchos niñ@s huérfan@s.

Buenas noches, me voy a la cama a seguir reflexionando hasta quedarme dormida.